Problemas más frecuentes con la batería

Publicado el: 24-1-2023

Cómo olvidar aquellas mañanas de invierno en las que nuestro automóvil nos dejó botados y, simplemente, no encendió. Claro, justo cuando teníamos una reunión o un compromiso ineludible. Lo cierto, es que esta falla -en la mayoría de los casos- es provocada por la batería. ¿Por qué? Porque estas funcionan mediante reacciones químicas, razón por la que es normal que experimenten descargas cuando están expuestas a climas extremos (exceso de frío o calor).

Si bien, el hecho de que nuestro vehículo no encienda también puede ser consecuencia de otros desperfectos, lo más común es que -en ciertas circunstancias- se deba a la batería. Por esta razón, es necesario que identifiquemos cuáles son las principales causas y síntomas de una batería con defectos o descargada.

Causas de desgaste de una batería

Una de las situaciones más comunes es dejar encendidos los componentes eléctricos del automóvil con el motor apagado. Esto provocará que la batería consuma toda su reserva de carga. Por lo general, ello ocurre cuando dejamos prendidas las luces interiores o exteriores.

Esto también podría ocurrir como consecuencia de fugas en el sistema eléctrico del auto, lo que podría ser provocado porque las terminales se encuentran sueltas, en mal estado o sulfatadas. Estos desperfectos impiden que la conversión química se transforme en energía eléctrica. Por este motivo, es importante verificar siempre el buen estado de las terminales.

Además, las baterías pueden tener fallas internas, lo que podría influir directamente en su carga. Si es que al revisarla notamos que esta se infló es porque, probablemente, sufrió un corte interno. En este caso, no queda más que reemplazar la batería por una nueva (recomendada por el fabricante).

De la misma forma, la carga y transmisión de energía de este dispositivo se pueden ver afectadas como consecuencia de que estén sueltas. Es decir, que no estén correctamente ajustadas a la base. Sus materiales de fabricación son delicados, por lo que el movimiento y los golpes suelen afectar, de manera considerable, la vida útil y capacidad de carga de toda batería.

Otras fallas más técnicas y que son frecuentes tienen relación con daños provocados al alternador o las terminales. Esto, al igual que el exceso de sarro, impide el correcto flujo de corriente para mantener la batería recargada.

Síntomas y recomendaciones

Algunos indicios para detectar si nuestra batería está fallando, además de que el motor no encienda, es que presente una débil señal de arranque al hacer el giro con la llave. Esto se debe a que el impulso que generamos en la batería con dicho movimiento no es suficiente para encender el motor. De ahí que tengamos que intentar más de una vez para que este, en algunos casos, se pueda poner en marcha.

Otro problema similar, es que la ignición del vehículo sea tardía. Es decir, cuando estamos en presencia de una batería defectuosa, al girar la llave el motor del automóvil demora varios segundos en encender y lo hace con dificultad. Aquí es evidente que la batería no está alimentando correctamente al resto de los componentes.

Asimismo, cuando estamos en presencia de luces con baja intensidad, tanto en el interior como en el exterior del vehículo, es una clara señal de que la batería presenta problemas con su carga. Ahora bien, si en el tablero del automóvil se ilumina la luz del alternador es porque, claramente, esta o uno de sus componentes tienen defectos.

Si observamos alguno de estos síntomas en nuestro automóvil, es probable que para salir del paso necesitemos recargar la batería mediante el tradicional puente (carga de un auto a otro). Sin embargo, es importante recordar que no se debe abusar de esta práctica, puesto que las baterías en ningún caso deben perder toda su reserva de carga, ya que podría ocasionar otras fallas eléctricas.

Por esta razón, es relevante que -ante cualquiera de estos síntomas- recurramos a nuestro técnico de confianza, de manera que pueda hacer los ajustes necesarios o cambiar la batería. Así evitaremos que los desperfectos y fallas se trasladen a otras piezas del automóvil.

¡Recuerda! Si cambias la batería por tu cuenta, revisa el manual y etiquetado. Opta siempre por la recomendación y características del fabricante. De lo contrario, pondrás en peligro otros componentes.